MAUPASSANT, GUY DE
Este texto de 1875 se sigue leyendo hoy con una sonrisa en los labios: su humor no ha caducado; su inteligencia tampoco. Cuenta la historia del peculiar doctor Heraclius Gloss, bibliófilo y hombre de costumbres, buena persona pero de gran ingenuidad, cabal y presuntuoso al mismo tiempo: su hallazgo de un manuscrito sobre la metempsicosis trastornará su vida y su cabeza para siempre.