SANTAMARÍA, ANGÉLICA
Los pies descalzos nunca fueron tan felices
como en las piedras planas sembradas en la verja.
La brisa nunca se tornó misericordia
como en las madrugadas llenas de trinos y lamentos.
Noches, velas, palabras y silencios
infancia, infancia, infancia...la montaña, la poza: el recuerdo.