BRODERICK, WALTER
A mediados de la década de los sesenta, tres jóvenes sacerdotes españoles, inconformes con el régimen franquista, optaron por unirse a los movimientos revolucionarios en América Latina. Trabajaron en parroquias de Bogotá y Cartagena, hasta que fueron deportados por sus actividades subversivas.
Regresaron clandestinamente a Colombia para incorporarse al incipiente Ejército de Liberación Nacional (ELN) en cuyas filas había muerto su héroe, Camilo Torres Restrepo. De los tres, solo sobrevivió Manuel Pérez quien, más adelante, llegaría a ser comandante de esa organización guerrillera hasta su muerte en 1998.
Este libro, que «se lee con el interés y la pasión de una buena novela» (revista Semana), cuenta las aventuras del sacerdote aragonés Manuel Pérez durante sus primeros años en el monte, donde vio la muerte de muchos compañeros. Algunos valientes guerrilleros fueron ejecutados por el autocrático comandante Fabio Vásquez Castaño. El mismo Manuel por poco termina ante el pelotón de fusilamiento. Persevera, sin embargo, contra mil adversidades. Aun a fines de los setenta, cuando el grupo guerrillero quedó diezmado, a este cabezudo español le pareció que «la lucha revolucionaria no se había acabado