VALDES LEZACA, CRISTINA LUCIA
Estos cuentos abordan los vestidos, no desde la perspectiva de la moda, sino como disparadores de la memoria, como pedazos de recuerdos que nos llevan a otras épocas de nuestra vida. Las prendas que usamos están cargadas psíquicamente; incorporan evocaciones sensoriales, todo un cúmulo de emociones que parecen quedarse flotando en el tiempo. Cinco cuentos, cinco mujeres en distintos momentos de su vida, narradas a través de sus prendas. Y a manera de pausa entre estas historias, se enuncian otros accesorios como el delantal de la abuela, la mantilla de una novia o la colcha que mujeres desplazadas tejen para sanar y no olvidar. Como colofón, el ropero con el origen de las palabras que designan a muchas de las prendas que usamos en nuestra vida cotidiana, tan hermosas como abrigo, que en latín significa ?defendido del frío?. Tal y como lo corroboró en sus instalaciones con prendas la artista francesa Louise Bourgeois, la ropa tiene el poder de un talismán para reactivar conexiones con gente, lugares y eventos que, de otro modo, estarían perdidas.
En cinco cortas historias, la autora reflexiona sobre los sentimientos y las vivencias que guardan esos trozos de tela que nos cubren a diario. El delantal de la abuela, la jardinera de una colegiala, el inseparable chal de la mamá, los idénticos abrigos de las hermanas. Estas prendas inspiraron una serie de cuentos ilustrados por Gina Rosas Moncada, que relatan un día en la vida de las protagonistas.